El próximo día 30 de enero, nuestro socio, José Luis Fernández Padró, el pater, cumple 45 años de sacerdote.

José Luis, fue primero bombero y después seminarista y cura. No fue una situación convencional. Alguien lo vio y lo convenció siendo ya adulto, habiendo vivido incendios forestales, inundaciones y careos con gobernadores o jefes de bomberos. Eso lo curtió y lo decidió. No tenía que elegir. Escogería las dos profesiones. Solamente él sabe cuál ha sido la más importante en su dilatada vida al servicio de todos.

Lo que empezó siendo una faena impulsada por el ardor de su juventud acabó siendo un Servicio provincial de Bomberos Voluntarios (que nunca vió la luz), después la Diputación de Barcelona creó el SPEI y una sucesión de circunstancias políticas lo convirtió en lo que hoy es la Direcció General de Prevenció i Extinció d’Incendis i de Salvaments de  Catalunya.

No se quedó aquí. Fue al Camerún, estuvo en Roma donde no siempre fue recibido de forma amigable. Su forma de actuar no era muy convencional. Asistió en parroquias, Teléfono de la Esperanza, Apostolado de la Carretera, Cuerpos de Bomberos,Policías, y Círculos católicos, pero nunca dejó de ser bombero.

Lo hemos visto en siniestros a donde se presentaba con una emisora que hasta funcionaba cuando las nuestras lo pasaban mal.Nos ha casado, nos ha enterrado y ha llorado con nosotros como uno más, porque nosotros  sabemos que los bomberos también lloran.

Se hizo socio de Aself hace ya muchos años y Aself le concedió la medalla de Honor de la Asociación. Voluntario por naturaleza y profesional por su dedicación  no queremos dejar pasar este momento tan importante en su vida sin que sepa que estamos con él.

Todos no podremos ir, pero el 28 de este mes de enero a las siete de la tarde cuando tu parroquia de Sant Isidor en la calle Urgell de Barcelona esté llena de tus amigos para acompañarte en esta fiesta, ASELF también estará contigo.

José Luis, pater, recibe un sentido abrazo de tu Asociación.